Cada vez hay más modelos de coches eléctricos que pueden ser comprados en el mercado de vehículos español. En todo este tiempo, tanto las baterías como la autonomía de estos vehículos han evolucionado y, por ende, han mejorado de manera considerable. Y se espera que evolucionen aún más en los próximos años.
Sin embargo, pese a que el coche eléctrico viene para quedarse, todavía son muchos los aspectos que necesitan ser mejorados para que su utilidad esté asegurada al 100%, como es el caso de la infraestructura de puntos de recarga, que no es todo lo abundante que debería serlo, mucho menos económica. Por ello, se vuelve imprescindible la instalación de un punto de recarga propio en el garaje para aquellas personas que cuenten con un coche eléctrico.
En este artículo queremos darte consejos básicos de manera que puedas instalar un punto de recarga para tu coche eléctrico en tu garaje y que éste esté de acuerdo a la normativa vigente.
Qué tener en cuenta para instalar un punto de recarga eléctrico en el garaje de tu casa
Es importante que tengas claro que, con un enchufe convencional de tipo doméstico y conector schuko, de los de 16 A y toma de tierra, ya podrás recargar tu coche eléctrico, aunque este tipo de enchufe sirve para realizar lo que se conoce como una “carga ocasional”, siendo imprescindible que la instalación de toma de tierra esté bien realizada para que la alimentación de ese enchufe sea perfecta.
Ahora bien, deberemos tener en cuenta que, con esto, no estaremos cumpliendo con la normativa (ITC BT-52) que establece que, para disponer de una estación de recarga, se necesitará de la instalación de un circuito exclusivo para el punto de recarga y que no podrá superar en ningún momento los 9,2 kW de potencia.
Para poder realizar una recarga más rápida, necesitaremos instalar una base mural de recarga (wallbox en inglés) que contará con un conector específico para la recarga de coches eléctricos. Las más habituales son las bases murales de recarga que trabajan desde 16 A a unos 3,7 kW de potencia, pudiendo ésta ser ampliada a través de la instalación de un cable de mayor sección y a través, también, de un suministro eléctrico de mayor potencia, como nos indican los electricistas Leganés, especialistas en la instalación de puntos de recarga para coches eléctricos.
Este punto de recarga puede tener un precio de entre 500 y 800 euros y, además, si la vivienda no es unifamiliar, sino que está ubicada en una comunidad de vecinos, tendrás que informar primero y por escrito de su instalación al vecino que actúe como presidente de la comunidad o al administrador, si esta figura existe. Esto es así porque está contemplado en la Ley de Propiedad Horizontal que la instalación debe ser más sencilla, sin que dicha decisión precise de estar sometida a la aprobación en una junta de vecinos.
Para los edificios de nueva construcción, sin embargos, la situación es ligeramente diferente, ya que el Real Decreto 1053/2014 hace mención a que en todos los garajes comunitarios de edificios de viviendas tiene que darse la existencia de una preinstalación de puntos de recarga eléctricos. Esta consistirá en una conducción común para que las derivaciones pertinentes sean mucho más sencillas a cada plaza de garaje.
Paso a paso para la instalación del punto de recarga eléctrico en viviendas unifamiliares
Una de las formas de hacerlo es realizar una derivación desde la vivienda a la plaza de garaje y que el consumo se añada al realizado en la vivienda, algo que podrás hacer si la plaza de garaje está en el mismo punto que la vivienda unifamiliar.
De no ser así, será necesario contar con el contrato y el suministro que resulten exclusivos para el punto de recarga de tu coche eléctrico. Por lo que la opción será instalar un contador único y un punto de recarga para cada usuario del garaje compartido que tenga un vehículo eléctrico y que la facturación se realice de manera individual.